Resumen:
El comienzo de la dictadura
cívico militar encabezada por el general Jorge R. Videla en 1976, con
la aplicación sistemática de las políticas neoliberales, comenzó un
proceso de desestructuración de la sociedad del trabajo, que alcanzó
un punto culminante durante toda la década menemista. La
transformación de la economía fue de tal magnitud que el desempleo
y el empleo ocasional se convirtieron en elementos estructurales que
modificaron de manera notable tanto la sociedad como sus
compartimientos. Como lógica consecuencia, las viejas formas de
organización y de protesta de los trabajadores, si bien no
desaparecieron, perdieron vigencia y peso y fueron reemplazadas por
nuevos actores, los desocupados, y nuevos formatos de protesta que
fueron liderando el conflicto social.